Recientemente llevé a mi perro y tengo que decir que quedé impresionado con el trato que recibió. Desde el momento en que entramos, nos recibieron con una sonrisa. Los trabajadores parecían amar de verdad a los perros y estaban más que dispuestos a responder cualquier pregunta que tuviera.
La residencia en sí estaba genial, con una amplia zona de juegos al aire libre y un área de descanso cómoda para los perros. Mi perro se adaptó rápidamente y disfrutó mucho su tiempo allí gracias a las actividades divertidas y a la atención personalizada que recibió. Además, me gustó mucho recibir actualizaciones regulares sobre cómo estaba y cómo se comportaba.
En resumen, estoy muy satisfecho con la residencia canina y la recomendaría sin duda a cualquiera que busque un lugar seguro y amigable para su amigo canino.