Pinela Terraza - Poio

Recomiendo este sitio para tomar algo: un vino, un café, una cerveza…. Las vistas, si está la marea llena, son muy bonitas. No obstante, mi experiencia comiendo allí no es para recomendar a nadie. El pulpo (sin sabor), los calamares, un poco mejor, pero en la misma línea. Y, lo peor, con diferencia, el cocido. Pedimos también sopa y la sirven con pasta (a mi el caldo me gusta sin pasta). Ya no nos atrevimos con el postre. Hemos pagado 70€ sin comer bien.

Una maravilla de restaurante. Nos trataron de forma excepcional, todo el equipo es majísimo y muy atento en cada detalle, lo que hace que la experiencia sea aún mejor. La cocina de Olga es espectacular, se nota el cariño y la experiencia en cada plato. Probamos el arroz de centollo y estaba increíble, sabroso y en su punto. También los fideos y las zamburiñas estaban para chuparse los dedos. Además, el restaurante está muy bien ubicado y las vistas son preciosas, perfectas para disfrutar de una comida tranquila y especial. ¡Volveremos sin duda!

Comimos muy bien en su terraza, vistas muy bonitas a la ría. Muy rico el arroz con zamburiñas, y espectaculares las almejas también.

Hemos estado varias veces, la comida siempre buena. Bonitas vistas hacia la ría de Pontevedra. Recomendable

Restaurante que está pegado a la carretera pero su parte trasera da a la ría con una buena terraza. El sitio es cómodo y el servicio es rápido con buena atención. La comida es de calidad y buenas cantidades. El arroz es para más de dos personas. Si pasas por aquí es una buena zona para comer y con unas vistas top a la ría

Zamburiñas, chocos, pulpos,… aquí hay todo lo que uno espera comer en Galícia y de calidad y precio similar a la que ofrece el 85% de los restaurantes y bares de la región. Vistas espectaculares sobre la ría, futuro espacio chill out, servicio encantador, terracita agradable, magnífica cocinera de la isla de Ons y propietarios extraordinarios que se preocupan por hacerlo bien. Como abren todo el año, fummetsvan os recomienda una escapadita fuera de temporada. Una gozada. Y si vais en camper, teneis una área de autocaravanas justo al lado.

Un lugar con un encantó especial , la comida esquisita me río yo de los chefs de renombre. Sin duda siempre que podemos volveremos. La carta de los vinos un ejemplo de variedad para todos los gustos y la temperatura perfecta . El ambiente genial y el personal profesional y con mucho esfuerzo y dedicación. Los postres caseros caseros seguid así 😘

Nada recomendable, raciones pequeñas, muy caro para lo que es, hemos pagado 130 euros para 4 personas y nos hemos quedado con hambre: 1 ración de chipirones, raxo (3 raciones), 1 ración de musaka, una ensalada con ventresca. El raxo no sabíamos que eran 3 raciones hasta que pagamos (pues le dijimos que calculara para nosotros 4), teniendo en cuenta eso, la ración de raxo entonces era super pequeña. La ración de musaka era de broma y el cordero brillaba por su ausencia, parecía una tapa más que nada (14,5 euros), lo podéis ver en la fotografía. Y la ensalada super pequeña que entiendo que el precio sería por llevar ventresca, pero en 4 bocados te la comías (foto). Y para terminar los cafés estaban quemados y el postre 2 filloas con Nutella - 11 euros. En definitiva, no volveremos, quizá sea mala suerte y nos ha tocado el día en que las raciones son más pequeñas o que su especialidad es otra.

La ubicación es inmejorable, con una terraza que ofrece unas vistas preciosas y hace muy agradable la experiencia. La comida está correcta, aunque sin destacar especialmente, y las raciones me parecieron demasiado pequeñas. En relación a la calidad y la cantidad, el precio resulta elevado. En conjunto, agradezco la atención y el entorno, pero no es un lugar al que volvería.

Nos ha encantado comer aquí. Las vistas son preciosas, hemos comido sentados junto a la ría y veíamos como subía la marea. La comida muy buena, sardinas por un lado y milanesa por otro. Además patatas con varias salsas. Applestrudel casero y tarta de fresa tb casera buenísimos. El personal es muy amable. El interior del local es bonito y tiene una decoración muy cuqui. Precios muy buenos para ser un restaurante bonito, con vistas estupendas y comida de calidad. Esta llegando desde Pontevedra, antes de llegar a Combarro. Aparcamos en la puerta casi por no haber sitio en Combarro y gracias a eso lo descubrimos. Comimos a las 16:00h porque se nos hizo tarde y todo perfecto, estaba abierto. Restaurante muy recomendable