No olvides seleccionar los mejores nutrientes para tus hijos. Una dieta balanceada en donde estén disponibles, frutas, vegetales, frutos secos, lácteos y proteína los hará crecer sanos y sin problemas dentales. ¡Eso sí! No olvidemos la higiene dental porque si descuidamos eso, toda buena alimentación habrá sido en vano.
Y también, recuerda acudir a consulta de valoración, al menos dos veces cada año.