Fuimos un fin de semana en pareja y la casa era pequeña pero espaciosa y muy acogedora, ideal para 4 personas (aunque íbamos dos y nos cobró precio para dos). Lo que más nos gustó es que había de todo tipo de menaje de cocina (sacacorchos y copas de vino incluidas, cosa que en otras casas no hay). Todo muy limpio, la chimenea funcionaba estupendamente, los dueños un encanto, pendientes en todo momento de lo que pudiéramos necesitar. La ubicación estupenda con unas vistas inigualables. Lo único que yo cambiaría son los sofás, que deberían cambiarlos si se van a utilizar como sofá cama. Aún así, sin duda volveremos y por supuesto lo recomendaremos. Gracias por todo.